River Plate estrenó el título en la Liga Profesional de Fútbol de Primera División con un empate en Rosario ante Central 2 a 2, en un emocionante y atractivo partido por la vigesimotercera fecha del certamen. El local jugó mejor en el primer tiempo porque atacó y presionó en el mediocampo cada vez que pudo, aun a riesgo de exponerse a los peligrosos ataques de la visita.
Alan Marinelli picó solo por la izquierda al minuto en una jugada invalidada por una inexistente posición adelantada, que mostraría el desarrollo de la mayor parte de la etapa inicial. Central se acercó con remates desviados de Gino Infantino y Francesco Lo Celso, pero River respondió a los 23′ con un derechazo de Braian Romero.
Hasta que a los 27′ Emiliano Vecchio tiró una pared con Lautaro Blanco por la izquierda, llegó al fondo, le metió un caño a Paulo Díaz y asistió con maestría a Marco Ruben, quien definió con un taco de zurda de antología, que pasó entre las piernas de Franco Armani y abrió el marcador, para erigirse, además, en el máximo artillero de la historia de Central, junto a Waldino Aguirre.
River, que jugó de a ratos, cuando la pelota pasó por Palavecino y Julián Álvarez, llegó con sendos remates altos de ambos, a los 40′ y 45′. Central, que fue superior en la etapa inicial, casi aumenta antes del cierre cuando Ojeda encabezó un contraataque por la izquierda y le metió el centro a Vecchio, quien la punteó de derecha pero Armani salvó en una gran atajada.
Marcelo Gallardo acertó en el ingreso de Jorge Carrascal por Romero en el complemento, porque abrió la cancha con los laterales y controló la pelota en el medio al sumar un volante.
El “canalla”, que tenía menos la pelota, tejió una gran jugada a los 12′ y estiró la ventaja: Vecchio tocó por izquierda con Lo Celso, apertura a Blanco, centro a la cabeza de Ruben y palomita del goleador al ángulo superior derecho, ahora sí para convertirse en soledad en el máximo goleador de la historia centralista con 99 tantos.
Pero River se recuperó rápido con el buen juego de sus volantes y laterales y lo empató con dos golazos de Palavecino desde afuera del área: a los 22′, Álvarez se la sirvió para que la clavara de tres dedos junto al poste derecho, y a los 29′ le pegó de emboquillada y la pelota pegó en el travesaño y picó adentro.
Rosario Central no pudo sostener el ritmo ni la ventaja en el marcador y finalmente sumó un empate que complica sus chances de clasificar a la próxima Copa Sudamericana. Los del Kily González tienen 49 puntos y están en el último lugar que otorga un boleto al certamen, pero con las mismas unidades está Gimnasia La Plata, que tiene un partido menos y que podría superarlos.