En medio de una preocupante temporada de incendios forestales, Córdoba y San Luis se enfrentan a una creciente amenaza debido a las condiciones climáticas adversas y a la sequía que afecta la vegetación, convirtiéndola en un material altamente inflamable. Los focos en San Luis alcanzaron zonas pobladas, poniendo en peligro viviendas y comunidades enteras.
Los gobierno de ambas provincias están trabajando arduamente para contener las llamas y proteger a las comunidades en riesgo, al tiempo que hacen un llamado a la prevención y la concientización sobre el impacto humano en la propagación de los incendios.
En Córdoba, los bomberos se enfrentan una situación crítica en los tres focos activos -dos en Calamuchita y uno en Santa María – por el contexto de sequía prolongada.
Allí, las condiciones climáticas, incluidos fuertes vientos y altas temperaturas, generaron un alto riesgo de propagación de incendios y dificultades para el combate del fuego.
El fenómeno conocido como el “Efecto Zonda” está exacerbando la situación en las sierras, generando vientos de alta intensidad que favorecen la rápida propagación de las llamas. Los vientos, en la jornada, alcanzaron velocidades entre 95 y 110 km/h en las zonas montañosas, y de 75 a 90 km/h en las áreas llanas del centro y este de la provincia.
En este contexto, el gobierno emitió una alerta de riesgo extremo de incendios, instando a los residentes a tomar precauciones y a evitar cualquier actividad que pueda desencadenar un incendio.Es que la intervención humana sigue siendo el factor principal en el origen de los incendios. Las autoridades de esa provincia confirmaron que más del 90% de los recientes focos son causados por actividades humanas, ya sea intencionalmente o no.
El incendio en San Luis avanzó hasta llegar a la localidad turística de El Trapiche, comprometiendo la seguridad de las viviendas en esta área. El fuego, que se originó en áreas rurales, se propagó rápidamente debido a fuertes vientos, afectando también la localidad de Barranquitas y causando estragos en el camino. Las autoridades locales están luchando contra las llamas con la ayuda de bomberos voluntarios y otros equipos de respuesta.