Boca Juniors logró la noche del miércoles la clasificación a octavos de final de la Copa Libertadores como segundo del Grupo C, pese a golear por 3 a 0 a The Strongest, de Bolivia, ya que el líder Barcelona se afirmó en esa posición al doblegar en Ecuador a Santos, de Brasil, por 3 a 1.
De esta manera los “xeneizes” debieron conformarse con el segundo lugar en la zona al finalizar esta noche la fase de grupos para los cuatro participantes, logrando el primer lugar Barcelona justamente a partir de los dos goles conseguidos por un ex-Boca como Damián Díaz, que anotó a los 15 minutos del primer tiempo y a los 10 del segundo, cuando amplió su compañero Jean Montaño a los 32.
El goleador Kaio Jorge había logrado el empate parcial para los brasileños a los 45 minutos del primer período. Y de esta manera Barcelona finalizó primero con 13 puntos, escoltado por Boca con 10, mientras que Santos y The Strongest cerraron con 6, aunque los paulistas fueron terceros por mejor diferencia de gol.
De esta manera todos los equipos argentinos lograron pasar a octavos de final de la Libertadores, aunque algunos casos como justamente los de Boca y River Plate fueron significativos, porque ambos finalizaron segundos en sus grupos.
Y puntualmente lo del “xeneize”, que volvió al triunfo después de cinco presentaciones sin victorias, no fue tampoco destacado en su rendimiento, como es costumbre, pese a la diferencia alcanzada sobre The Strongest, porque el conjunto boliviano disminuye en gran medida su accionar cuando baja desde los 3.650 metros de altura de La Paz.
Lo de Boca fue una consecuencia de un planteo propuesto por su técnico Miguel Ángel Russo con línea de tres en el fondo, proyectando a Nicolás Capaldo, de gran rendimiento, por la derecha, y al colombiano Frank Fabra por izquierda.
Y justamente Fabra también cumplió con su cometido en la faz ofensiva, remarcándose una vez más que es efectivo en ese rubro que zozobra a la hora de defender, algo que se puso de manifiesto en mayor medida en las últimas pálidas presentaciones de su equipo.
Y de hecho a Boca todo se le simplificó rápidamente, porque ya a los tres minutos ganaba con un golazo de Agustín Almendra tras un error de salida del conjunto paceño.
Pero cuando la noche parecía pintar redonda para el joven y talentoso volante boquense, sobre la media hora del primer tiempo debió abandonar la cancha con una aparente contractura en el aductor derecho, lo que encendió las alarmas respecto de su presencia en la semifinal del próximo lunes a las 15 en San Juan ante Racing Club, por la Copa de la Liga Profesional.
El colombiano Jorman Campuzano ocupó su lugar y faltando un minuto una combinación entre Fabra y Sebastián Villa concluyó con éste tocando la pelota al segundo gol boquense dentro del área chica.
La comodidad fue mala consejera para Boca, porque se relajó en la segunda mitad en la mayoría de sus integrantes, excepto Carlos Tevez, quien le reclamaba a sus compañeros más energía y precisión para aumentar cifras y soñar con el primer lugar en el grupo si perdía Barcelona.
Sobre los 10 minutos lo escuchó Villa, quien desbordó por derecha y lanzó un centro bajo justamente con destino a Tevez que estaba dentro del área chica, pero el balón fue interceptado por el defensor Gabriel Valverde con tan mala fortuna que batió su propio arco.
El 3 a 0 era cosa juzgada y las noticias que llegaban desde Guayaquil no eran las mejores porque Barcelona, dirigido por el argentino Fabián Bustos, quebraba la paridad del primer período y vencía con autoridad a Santos, sellando el segundo puesto “xeneize” en la zona.
Nada cambiaría entonces hasta el final, que encontró a Carlos Izquierdoz celebrando sus 100 partidos con la camiseta de Boca, mientras que algunos otros quizá se la hayan puesto por última vez esta noche.
El próximo martes se sortearán los octavos de final que se jugarán después de la Copa América, y si algo es seguro es que en esa instancia no habrá “superclásico”.