La Unión Tranviarios Automotor (UTA) definió este lunes realizar un paro de actividades por 72 horas en el interior del país, luego de la reunión que mantuvieron con la Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros (Fatap), en la que no llegaron a un acuerdo entre las partes.
El paro de colectivos en el interior del país será martes, jueves y viernes. El miércoles habrá servicio normal debido al censo.
La medida de fuerza afectará a las líneas de larga, media y corta distancia, y ya había sido anunciada para el martes pasado, pero fue desactivada luego de que la cartera de Trabajo dictara la conciliación obligatoria, que vence este lunes a las 23.59, y no puede volver a dictarse.
“Solo avanzamos en el pago de una suma no remunerativa de $ 20.000 en dos cuotas”, indicaron los secretarios gremiales que participaron de la reunión en el ministerio de Trabajo, pero agregaron que lo que buscan es que el sueldo de los trabajadores “se adecue a los tiempos que estamos viviendo”.
Desde el sindicato aclararon que no se correran de su objetivo que es “equiparar los sueldos de los choferes del interior con los salarios que se pagan en el AMBA”.
No afectará al censo
El ministerio de Trabajo solicitó a las partes que la medida tenga en cuenta el próximo operativo censal en el país, del miércoles 18, y ante el requerimiento, las partes acordaron levantar las medidas de fuerza durante ese día.
“No vamos a hacer paro el dia del censo”, le confirmó Roberto Fernández, titular de la UTA al ministro de Trabajo, Claudio Moroni.
El 8 de abril, la UTA cerró un acuerdo para los choferes de corta y media distancia del AMBA, con un aumento del 50%, escalonado, que llevará el salario básico a 150.000 pesos desde agosto. Además del pago no remunerativo de 43 mil pesos, en cuatro cuotas.
El gremio reclama que se equiparen los salarios del interior del país con los que perciben por el mismo trabajo aquellos que prestan servicios en AMBA.
Lo que dicen los empresarios
Según los empresarios, el impacto de la nueva pauta salarial sería de 14.000 millones de pesos para el interior del país, y de no ser acompañados con nuevos subsidios nacionales, esos fondos deberían provenir de las empresas o de los estados provinciales.
“Si bien desde Nación se ratificó el compromiso de establecer un fondo de 46.000 millones de pesos para el interior en 2022, los subsidios para todas las jurisdicciones apenas representan el 15 por ciento del total, mientras que el restante 85 por ciento se destina al AMBA. Eso hace que tanto los gobiernos provinciales como las empresas del interior del país cuenten con muchos menos recursos para hacer frente a los nuevos acuerdos salariales”, advirtieron los empresarios del transporte.