El Gobierno realizará un pago parcial –a cuenta de capital y en dos cuotas– de US$430 millones al Club de París para evitar un default el 31 de julio.
Por esa decisión, que privilegia “un tratamiento comparativo” con otros acreedores, el país obtendrá un puente hasta el 31 de marzo de 2022 para lograr un cierre definitivo de la deuda de US$2400 millones. Antes de esa fecha deberá tener un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Hemos llegado a un entendimiento con el Club de París para obtener un puente de tiempo que nos permita no tener que enfrentar una situación de incumplimiento o default el día 31 de julio de este año”, anunció el ministro de Economía, Martín Guzmán.
En el Palacio de Hacienda afirmaron que, al no haber default, no hay punitorios a pagar por el preacuerdo alcanzado, pese a que no haya una solución definitiva. La letra chica del acuerdo, prometieron, estará en el decreto que reasignará partidas para los pagos.
El Gobierno había decidido no pagar a fines de mayo una deuda por US$2400 millones (capital e intereses) con el Club de París, cuyos principales acreedores son Alemania y Japón, y que fue reestructurada por Axel Kicillof en 2014. Tenía 60 días de gracia para abonar el pasivo para no entrar en un nuevo default. En sus giras por Europa, el ministro de Economía había recogido de sus pares europeos la necesidad de llegar a un acuerdo previo con el FMI por el Stand-By (SBA) de 2018 para poder postergar los pagos con el Club de París.
“Pagar esa cantidad hubiese sido un golpe a las reservas internacionales y hubiese generado más inestabilidad cambiaria y macroeconómica en general”, dijo Guzmán en conferencia de prensa en el microcine del Palacio de Hacienda, y agregó: “Una situación de default también hubiese generado efectos desestabilizantes y de incertidumbre e imprevisibilidad”.
Guzmán aclaró que el entendimiento con el Club de París consiste en que la Argentina tendrá tiempo hasta el 31 de marzo de 2022 para apuntar a “una reestructuración más permanente” con esa entidad. Agregó que “la Argentina continuará haciendo esfuerzos para llegar a un entendimiento con el FMI” que permita refinanciar el stock de deuda de US$45.000 millones tomado por Mauricio Macri.
“Continuaremos trabajando de manera constructiva con el FMI”, dijo el ministro de Economía, y añadió: “Este horizonte de tiempo nos da mayor certidumbre. La fecha del 31 de marzo de 2022 no quiere decir de modo alguno que tenga que ver con objetivo de acuerdo con el FMI; nuestro objetivo es tener un buen acuerdo, cuanto antes mejor, pero la prioridad es que sea bueno”.
El segundo elemento importante del reacuerdo parcial con el Club de París, explicó Guzmán, es que se respetará el principio de “tratamiento comparable” entre acreedores bilaterales oficiales. Básicamente, el ministro recoge así las quejas de países como Japón (acreedor importante), que cuestionaban la decisión de pagar deudas a China mientras se postergaban a otros acreedores.
“En el período de ocho meses, en lugar de hacerse frente a los aproximadamente US$2400 millones programados, se hará frente a un conjunto de pagos que sumarán alrededor de US$430 millones. Implica un alivio financiero para la Argentina de US$2000 millones entre ahora y el 31 de marzo”, afirmó el ministro. Guzmán dijo que un pago será el 31 de julio y aclaró que habría otro desde 2022. Para eso, el Gobierno prevé publicar un decreto para readecuar partidas presupuestarias.