Con 140 votos a favor, 104 en contra y 1 abstención (de José Cano), Diputados convirtió en ley el Consenso Fiscal 2020 firmado entre el presidente Alberto Fernández y los gobernadores, que otorga $ 70.000 millones a las provincias para reactivar sus economías, prohíbe el aumento de la deuda pública, habilita la suba de Ingresos Brutos y Sellos y suspende procesos judiciales por la distribución de la Coparticipación Federal.
Se trata de la iniciativa que las provincias argentinas firmaron el acuerdo, excepto San Luis y La Pampa, que brindaron su apoyo pero no rubricaron el documento porque tampoco habían adherido al anterior pacto fiscal; y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, enfrentada con el Gobierno tras la quita de un punto de la coparticipación.
Juntos por el Cambio votó en contra de la iniciativa que reemplaza el Pacto Fiscal 2017 sancionado durante el gobierno de Mauricio Macri. El misionero Luis Pastori fue el orador en representación de la bancada y argumentó que la iniciativa “lesiona los intereses de los contribuyentes de las provincias sobre los Ingresos Brutos y los Sellos”, a los que ubicó entre “los impuestos más regresivos de la Argentina”.
Además, el radical recalcó que resulta “un retroceso” respecto del Pacto Fiscal 2017, que aspiraba a que las provincias “tengan una baja gradual de los impuestos provinciales”.
Los temas que no fueron
Tras una mañana intensa en la que el Frente de Todos se alzó con el dictamen de la “ley de superpoderes” que le otorga facultades al Ejecutivo para tomar medidas restrictivas en el marco de la pandemia, el oficialismo desistió de llevar el tema a la sesión que comenzó pasadas las 15.30. De hecho, según pudo saber este medio, el oficialismo ni siquiera hizo alusión al tema en la reunión que mantuvieron en la previa al debate los jefes de bloque.
La convocatoria sorpresiva que hizo días atrás el oficialismo para dictaminar hoy -en la previa a la sesión- encendió las alarmas de la oposición. Puntualmente, de Juntos por el Cambio, que interpretó que el oficialismo finalmente había conseguido los votos suficientes para sancionarla hoy mismo. Pero, conforme fueron pasando las horas, quedó en evidencia que, al menos hasta ahora, el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, sigue sin juntar los votos para sancionar la ley que ya fue avalada en el Senado.
Ante este panorama, una vez más, el presidente Alberto Fernández deberá apelar a un nuevo DNU (el último vence mañana) para establecer medidas restrictivas en el marco de la pandemia. Pese a que esta semana, el propio jefe de Estado daba por hecho que hoy el texto que dejó en manos de su secretaria Legal y Técnica Vilma Ibarra sea ley.
Además, y pese a los rumores que circularon en la previa a la sesión, tampoco se tratará hoy -sobre tablas- el proyecto de ley que da marcha atrás con el pago retroactivo del monotributo para el primer semestre del año que presentó ayer Massa. De sancionarse en el Congreso, los aumentos regirán desde julio y se abren planes de facilidades de pago para quienes tienen deuda.
Según dejaron trascender desde el oficialismo, este proyecto comenzará a tratarse en comisión la semana que viene y recién llegaría al recinto la siguiente semana, cuando Massa esté de vuelta de su gira por los Estados Unidos.