Luego de la reunión donde firmó su renuncia el exministro de Desarrollo Productivo Matías Kulfas, el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, presentaron este lunes el proyecto de renta inesperada en el Museo del Bicentenario.

La medida, que debe ser debatida en el Congreso, apunta a captar parte de las ganancias extraordinarias que un grupo de empresas registran por los efectos derivados de la invasión rusa a Ucrania.

Según remarcaron desde el Gobierno, es que la base de esa “renta inesperada” está en las fuertes alzas en los valores de las materias primas, energía y alimentos. Si bien ya no se mueven en los picos que alcanzaron en marzo, siguen en niveles elevadamente altos y generan un incremento “muy significativo” en el margen de ganancia de un grupo de empresas.

“Vamos a presentar un proyecto para administrar la renta inesperada que habíamos anunciado hace algunas semanas en un momento muy difícil a nivel global, que es el contexto de la guerra de Rusia en Ucrania”, comenzó su discurso el titular del Palacio de la Hacienda.

En ese sentido, sostuvo: “Todo el mundo está lidiando con un problema de inflación, de distribución de los ingresos y con la necesidad de acciones por parte de los Estados para evitar mayor pobreza y desigualdad. La Argentina no ha quedado exenta de eso”.

Guzmán se refirió al debate que se armó luego de que habían anunciado el proyecto a principios de abril y apuntó: “Decir “me opongo” a cualquier acción necesaria para que una sociedad no sufra más desigualdad es perverso y no nos representa”.

“Valoraremos el acompañamiento del Congreso de la Nación para evitar las injusticias. Queremos un crecimiento que sea sostenido e inclusivo y la única forma de sostener un crecimiento que signifique progreso es el crecimiento que compartimos entre todos y todas”, concluyó.