River resolvió rápidamente el encuentro ante Nacional de Uruguay, que comenzó bien plantado y le jugó de igual a igual hasta que sufrió la expulsión de su arquero Sergio Rochet, a los 18 minutos.

El arquero local, justamente, fue el protagonista principal de la jugada que cambió por completo el partido. Carrascal, una de las figuras de River, metió un pase preciso para Borré que fue interceptada por Rochet, quien se anticipó de manera perfecta pero el despeje terminó en los pies de Matías Suárez, con todo el arco a su merced. Sin embargo, el ex delantero de Belgrano tuvo una mejor resolución y enganchó ante la desesperada salida del arquero, que le cometió falta y se fue expulsado.

A partir de entonces, fue todo de River, quien manejó los hilos del encuentro y llegó a la apertura del marcador diez minutos después. Carrascal mostró una vez más su riqueza técnica y luego de enganchar para su perfil diestro, colgó del ángulo la pelota. El merecido segundo tanto llegó a los 44 minutos, con una definición muy similar, pero esta vez de parte de De La Cruz. Cuando parecía que la etapa finalizaba con esta ventaja, Nacional elaboró una impecable jugada colectiva y descontó un minuto después por intermedio de Cougo.

Como era de esperarse, River salió con todo al complemento. Cuatro minutos le alcanzaron para que Zuculini anotara el tercero y segundos después el cuarto, aunque este estuvo bien anulado por offside. En tanto, Borré estrelló la pelota en el palo y, con mucha fuerza de voluntad, Nacional marcó el segundo por intermedio de Santiago Rodríguez, quien enganchó de manera perfecta para sacarse de encima a Díaz y definió ante Armani.

El arquero suplente Mejía se lució con una estupenda tapada, a un remate de tiro libre de De La Cruz que tenía destino de gol. El manotazo evitó que la pelota ingrese por el ángulo superior izquierdo.
La confianza que le daba saber que el rival tenía que marcar cuatro goles para avanzar, la línea defensiva del visitante comenzó a tener serias desatenciones. Como una mala salida de Díaz, que casi termina con el gol del Lores. Poco le importó esto a River, que en cada ataque llevó peligro de gol. Borré marcó el cuarto, mientras que Carrascal por milímetros no convirtió el quinto, tras una excelente acción individual dentro del área.

Nacional, que terminó jugando con muchos jóvenes, sintió el desgaste y la intensidad que le puso River a su juego. El equipo de Núñez nunca sacó el pie del acelerador y Borré volvió a anotar, tras la habilitación de Gonzalo Montiel y un sorprendente quedo de la defensa del conjunto local. Y sexto del colombiano cerró una gran noche para River.